BlackBerry Messenger notifica la lectura de los mensajes. Lo hace mostrando una R al lado del texto. Para algunos, esta es una gran ventaja frente a otras aplicaciones. “WhatsApp,” dicen los fans de BBM, “solo informa sobre la recepción, no sobre la lectura”.
Es cierto, WhatsApp no notifica la lectura de los mensajes. No lo hace porque es una aplicación honesta.
Veréis: no hay forma de asegurar que alguien ha leído un mensaje. Es más, los mensajes se pueden leer sin activar las notificaciones: basta con usar las utilidades oportunas. Finalmente, ninguna aplicación puede entrar en el cerebro del usuario y verificar si este ha leído el mensaje.
Aun así, muchas personas pasarán a BBM para disfrutar de la seguridad psicológica que da esa R.
Lo que pasa es que la R da demasiada información. Presupone que la carga del mensaje conlleva su lectura, cuando eso no siempre es cierto. La tensión resultante es inaguantable: ¿por qué Fulano ha ignorado mi mensaje? ¿Por qué Zutano no contesta? Al final, o ignoras la maldita R o enloqueces.
Hay cosas que yo prefiero no saber, sobre todo si su veracidad es dudosa. Eso incluye la lectura de los mensajes que envío. Por eso me quedo con WhatsApp y sus marcas imperfectas. Me quedo con la felicidad que viene de no saber. O mejor dicho, de no creer saber.